El hecho de que existan contenedores fijos, salvo zona centro, conlleva inevitables molestias causadas por olores, sin contemplar el impacto estético y la dificultad de visibilidad en ciertos accesos-salidas de garajes. Desde nuestro despacho se gestionan gran número de recursos al Ayuntamiento para la reubicación de los contendores por las molestias que causan a nuestros Administrados. A ello se añade el efecto “llamada” que están causando las noticias internacionales en las que anuncia la quema indiscriminada de este tipo de recipientes y, como no, en Zaragoza no nos escapamos. El ejemplo, cada vez más extendido, de diversos municipios, pasa por soterrar los contenedores en el subsuelo. Desde Dogar, apoyamos este tipo de iniciativas en pro de mejorar el aspecto de Zaragoza y evitar las molestias a los ciudadanos así como los actos vandálicos sobre los contenedores. | 
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